Qué mejor forma de comenzar estos comentarios sobre la actualidad cultural de Ávila que hablar del nacimiento ciudadano surgido para defender la instalación de la prometida subsede del Museo del Prado en Ávila, cuyas obras comenzaron hace más de diez años y permanecen paralizadas.
"El Prado en Ávila es el nombre de esta Plataforma integrada, entre otros, por el empresario José Antonio García Llorente y el exconcejal de IU Pedro Tomé, quienes se han planteado como primer objetivo la recogida de firmas que apoyen la petición y entregárselas, en otoño, al ministro de Cultura, José Ignacio Wert, con quien quieren entrevistarse, eso si por entonces aún es ministro, ya que, según los mentideros políticos, tiene todas las papeletas de ser como esas hojas que en otoño todos sabemos donde acaban.
El Observador Abulense se congratula del nacimiento de esta plataforma ciudadana y ya ha firmado la petición de la instalación en Ávila de la susodicha subsede del Museo del Prado. Igualmente hace suyo la consciencia de la necesidad de que Ávila, Ciudad Patrimonio de la Humanidad, se convierta en un importante referente cultural en España.
Pero al Observador Abulense le da grima ver alguna foto de miembros de la Plataforma reunidos con responsables políticos y le recuerda alguna que otra foto de esa otra plataforma en defensa del ferrocarril, donde se podría hacer una adaptación del Síndrome de Estocolmo, en la que víctimas y verdugos comparten, aunque sea de forma metafórica, mesa y mantel.
Rememorar la veces que ya se ha inaugurado este Museo del Prado en Ávila al Observador Abulense le parece una ímproba tarea que le llevaría su tiempo buceando por hemerotecas, cosa que, en estos momentos, no tiene ni humor ni ganas.
No obstante, le gustaría recordar un artículo publicado en el diario ABC el 20 de noviembre del 2011 que daba así la noticia sobre las obras de acondicionamiento del inmueble que acogería este Prado en Ávila. El Observador Abulense cree que es bueno refrescar la memoria.
Las obras de restauración, rehabilitación y acondicionamiento del Palacio de los Águila y el edificio anexo, que albergarán el Centro de Gestión de Depósitos del Museo del Prado en la capital abulense, estarán finalizadas «a mediados de 2012», en concreto, en junio del año próximo, tras una inversión cercana a los diez millones de euros y con cinco años de retraso, ya que estaba previsto que las actuaciones concluyeran en 2008.
El proyecto del Palacio de los Águila comenzó su andadura en el año 1998, con un convenio firmado por la entonces ministra de Cultura, Esperanza Aguirre, y el Ayuntamiento de Ávila y un presupuesto inicial de cuatro millones de euros, aunque no fue hasta el año 2003 cuando se adjudicaron las primeras obras, con la idea de que estuvieran finalizadas cinco años más tarde. El hallazgo de los restos arqueológicos y discrepancias entre el Gobierno y la empresa adjudicataria, Construcciones Quijano, retrasaron el proyecto hasta la adjudicación definitiva a Dragados, en otoño del año pasado. Parece que finalmente, será 2012 la fecha en la que el proyecto se haga realidad, según estimó la subsecretaria de Cultura, Mercedes del Palacio, en una visita a estas dependencias para las que, no se ha establecido una fecha de apertura.
Según detalló Del Palacio, tras la finalización de las obras que en la actualidad se están ejecutando, correspondientes a una última fase, de más de cuatro millones de euros, que se encuentra «al cincuenta por ciento», tendrá que adjudicarse el equipamiento —estimado en un millón de euros—, así como el acondicionamiento de los jardines.
Una vez que el Palacio esté listo, se pondrá en manos del Museo del Prado para que dé el visto bueno a las dependencias y decida cuándo comenzar a trasladar las obras para su gestión y almacenamiento y, por lo tanto, para abrir las puertas de la subsede del Prado en Ávila.
Serán más de 6.300 metros cuadrados los que conformarán el Centro de Gestión de Depósitos del Museo del Prado, la primera pinacoteca nacional, que cuenta con 3.300 obras «en la diáspora», colgadas en instituciones públicas españolas en el país, en el extranjero o almacenadas, informa Ical.
El Palacio o Casa de los Águila se convertirá no sólo en una sede para «regenerar» el Museo del Prado, sino también en unas dependencias «de enorme importancia» que han sido recuperadas para darles utilidad y convertirse en un foco de atracción de visitantes.
Con un diseño de Pedro Feduchi, el Centro de Gestión de Depósitos del Prado se divide en dos edificios. El uso público se concentrará en el Palacio y en la cafetería, mientras que los empleados, además de estos espacios y la nueva construcción, ocuparán un almacén y talleres. A estas dependencias se suman los jardines y la garita de entrada.
